Bueno, por fin libres de la garrapata, ahora ya solo queda intentar judicialmente el cobro de la deuda, aunque eso ya es más difícil.
La garrapata se fue porque el juzgado actuó, no porque lo echaran, sino que el timador profesional se vio tan apurado que el día antes del juicio se marchó voluntariamente.
No le ha servido de nada, se pensaba que se iría de rositas, pero el juicio se ha celebrado, ha sido declarado en rebeldía, al pago de costas, y la reclamación económica sigue su curso.
La lastima es que me consta que se ha marchado a otra casa a fastidiarles la vida, y no soy capaz de averiguar por ahora el domicilio para avisar a su pobre casero, en fin, no pararé hasta localizarlo, advertirlo y si quiere, ayudarlo a sacar de su casa al chupa sangres.
Por principios y por obligación social.
El que quiera más datos que me envíe un correo identificándose, y le proporciono nombre y apellidos.
arrepentidodealquilar@gmail.com
La zona donde vive el moroso es un pueblo de Castellón famoso por sus langostinos.
Su segundo apellido es igual al de un político mano izquierda del ex presidente del gobierno Felipe Gonzalez, y no doy más pistas porque legalmente no debo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Comenta lo que quieras, incluso si eres un moroso, !Hasta de lo malo se aprende¡ Pero no seas vulgar ni obsceno, que entre personas estamos ¿o no?